viernes, abril 29, 2005

29 de Abril

CONTROL.- SINTONIA CUADERNO BITACORA

CUADERNO DE BITÁCORA DE LA CIUDAD INVISIBLE.
[Ráfaga]
Posiblemente todo sucedió un día como éste, con su tarde y su ocaso para tomar aliento de camino a la noche. Por suerte el viajero ya contaba con un cuaderno en el que registrar lo que iba descubriendo. Su nombre era George Borrow. Recorrió toda España en plan misión especial de la Sociedad Bíblica Británica. Y todo ese periplo, fue y lo metió en un libro: la Biblia en España... Hoy, antes de echar pie a tierra aquí, en Pucela, a unos 41º 38' latitud norte y 4º 43' longitud oeste, me dispongo a leer sus impresiones..
[Rafaguita]
Valladolid está situado en medio de un inmenso valle, o más bien hondonada, abierta, al parecer, por una fortísima convulsión de la planicie castellana. Las alturas de las inmediaciones no son, propiamente, una elevación del suelo, sino más bien los bordes de la hondonada. Son muy escabrosas y pendientes y de aspecto por lo demás insólito. Parece que en épocas remotas toda esta comarca estuvo trabajada por fuerzas volcánicas...
Hay en Valladolid numerosos conventos, ahora abandonados, magnífica muestra, algunos de ellos, de la arquitectura española. La iglesia principal, bastante antigua, está sin acabar; propusiéronse los fundadores levantar un edificio muy vasto, pero sus medios no bastaron para realizar el plan. Es de granito sin labrar...
Valladolid es ciudad fabril; pero, en cambio, su comercio está principalmente en manos de los catalanes, establecidos aquí en número próximo a trescientos.
Posee una hermosa alameda, por la que corre el Esgueva. La población dícese que llega a sesenta mil habitantes.

[Ráfaga]
¡Increíble! En apenas un minuto Borrow habla de Geología, Arquitectura, Religión, Arte, Economía, Inmigración y Ocio... Una guía completita, que no?... Pues a ver si resulta y acabamos hallando en estas calles las dársenas amables de la Ciudad Invisible.

CONTROL.- FUNDE SINTONIA CON CUÑA


Hoy, aprovechando que el Pisuerga pasa por el Valladolindie, pasará por cubierta Ginés Martínez (para presentarnos sus Estancias Dibujísticas), seguiremos en Busca del Canto de las Sirenas con Karton Boulevard Imbérica, y acabaremos, entre bambalinas, hablando a media luz, con Fernando Urdiales, capitán del Teatro Corsario. Si quieres vernos ya sabes:
19:00 hrs. Stop. Retransmisión de La Ciudad Invisible. Stop. Salón de Conferencias Casa del Estudiante. Post!

miércoles, abril 27, 2005

Canalejas tertuliano

Leyendo las Notas de una vida, del Conde de Romanones, uno puede llegar a descubrir las motivaciones que llevan a un hombre a la política. A pesar de envolver sus secretos deseos en el celofán del progreso y el interés del pueblo, Romanones deja bien claro que buscaba el poder, y que no dudaba en sacrificar a sus amigos con tal de conseguirlo. Pero además, en las páginas de estas memorias encontramos a todos esos personajes que protagonizaron la convulsa época de la Regencia y que acabaron desalojando a Alfonso XIII para imponer la República que a tantos decepcionó.
Una de esas figuras es la de Canalejas, líder de la facción progresista del partido Liberal, que, por lo que cuenta el autor, podría perfectamente haberse dedicado a las tertulias radiofónicas si hubiese vivido en nuestros días.
Situémonos en los banquetes que se celebraban en el Nuevo Club:


Canalejas dejaba correr a borbotones lo que constituía uno de sus mayores defectos: la malignidad; malignidad, en el fondo, inocente, inspirada no por la intención de hacer daño, sino por el deseo de que la risa siguiera a sus punzantes gracias. Maestro como pocos en el arte de la imitación, no tenía rival para imitar la voz, el ademán y el gesto de aquellos a quienes hacía blanco de su ingenio, poniéndolos a veces en ridículo.

Notas de una vida
Conde de Romanones

lunes, abril 25, 2005

25 de Abril

CUADERNO DE BITÁCORA DE LA CIUDAD INVISIBLE.

Surcar la procelosa mar de las ondas hertzianas puede ser una excelente terapia para el espíritu, en aquellos momentos en los que se derrumba y nos sentimos vacíos, perdidos en su vasta soledad. Proust conocía bien el efecto revitalizador de las tempestades, y por eso acudía en sus tiempos perdidos (que no muertos) al recuerdo de las costas bretonas, allí donde el Atlántico se bate con Europa sin descanso. Iba a chutarse rugido de olas, y hordas aulladoras de vientos y de lluvia... Pero yo necesito mucha paz interior. Por eso estoy gozando de este viaje. Nuestra nave galopa sobre el lomo de agua de la primera bestia de este mundo, y lo hace suavemente... dejando que se escuchen los sonidos de fondo del camino...

Pronto la cabalgada es un paseo. Son nuestros propios pies los que nos llevan, porque hay eco de pasos. En el espacio tiempo se perciben honduras, distintas densidades, se le llama aire libre. Un murmullo de fondo nos habla en el secreto lenguaje de las plantas, como un flujo que canta en muy baja frecuencia. Una conversación que nunca cesa entre los nuevos brotes - unos recién llegados-, y los pacientes árboles, a veces centenarios, que conocen a fondo los misterios del bosque. Pero también ranas en coro de burbujas, con ojos asombrados, hechizadas por su propio runrún. Y pájaros que llevan en la voz las canciones que canta el aire entre los picos, refrescantes como ese yoreloreleriú que hubo entre Heidi y Pedro, a espaldas del abuelo. Inevitablemente, el paseo nos devuelve al pasado, al placer infantil con el que comenzamos a ir un poco más allá y empezó a construirse el universo. Aquel fue el primer paso de este viaje en pos de la quimera.
Seguimos navegando. Hacia el punto de fuga por el que el Sol se escurre de la faz de la tierra. Un rumbo que el azar ha señalado, y al que la timonel ya ha puesto proa: el puerto resguardado de la Ciudad Invisible.


[Hoy navegaremos por el Parque Nacional del Guadarrama, desde dentro y desde fuera. También nos visitará el músico Omar Faruk Tekbilek, para presentarnos su nuevo disco The Patience Tree, y acabaremos rodeados de batracios en la exposición El encanto de las ranas que se puede ver en la Fundació Caixa Laietana]

Bienestar y Vanidad

... nunca se resignaba a comprar algo de lo que no se pudiera obtener un provecho intelectual y sobre todo el que nos procuran las cosas bellas al enseñarnos a buscar deleites distintos de las satisfacciones debidas al bienestar y a la vanidad.

Por la parte de Swann, de En busca del tiempo perdido
Marcel Proust.
Estado del Bienestar: Estado de adormecimiento. Se enarbola la solidaridad, se pretende combatir la injusticia más allá, cuando la verdadera injusticia es llevar una vida que uno no merece; una vida para la que uno no ha hecho ningún mérito. Eso crea un malestar profundo que afecta a todos los órdenes. Por eso la degradación de la meritocracia... para que no se note la injusticia, y la vanidad no sufra, pobrecita...
Por cierto, para los admiradores del “pequeño Marcel” se ha reeditado “Monsieur Proust” el libro de Celeste Albaret, la fiel criada que compartió los últimos años de la vida del escritor. Imprescindible para todos aquellos que quieran acercarse al autor evitando mitificaciones y prejuicios. "Monsieur Proust" (Celeste Albaret). RqueR Editorial.

miércoles, abril 20, 2005

18 de Abril

CUADERNO DE BITÁCORA DE LA CIUDAD INVISIBLE

Sopla un tifón venido de no se sabe dónde, con la fuerza de cientos de titanes. Zarandea el navío sin ningún miramiento, como jugueteando con las enormes olas excitadas. Y aquí arriba, en la cofa, me parece escuchar en el rugir del viento el eco de la risa de las nubes que pasan, nos señalan y dicen “mirad cómo se mueven”, y siguen su camino de indolente rebaño sumiéndose en la niebla del éter del sonido...

No sé dónde está el chiste; no le encuentro la gracia yo al asunto... Si no es de esta manera, al ritmo caprichoso del océano, no hay modo de viajar por el espacio-tiempo. Las cosas y los seres suelen verse ceñidos por una tenue línea, quebrada e intangible, a la que hay que buscarle el intersticio. Mientras no lo encontremos no habrá nada que hacer. Podremos andar cerca, piel con piel que se dice, y no hallaremos modo de acceder al secreto que siempre está escondido. Pero cuando acertamos a dar con la hendedura, cuando se abre el camino entre las negras sombras, podemos prepararnos para cualquier sorpresa. Veremos el gigante que atesora el pequeño, la heroína en la amante que duerme a nuestro lado, o una exótica dama del Oriente en el amigo que sonríe en silencio... cualquier magia es posible en esa esfera incierta, el portento está ahí durmiendo el dulce sueño que tienen las quimeras... la utopía que vamos persiguiendo...
Seguimos navegando... O eres tú quien te mueves, y estamos aquí inmóviles. Como estatuas de voces olvidadas. Esperando el momento para abordar tu mente y, a través de tus ojos, tratar de descubrir las dársenas amables de la Ciudad Invisible.
[En cubierta Cristina Morató con su libro Las Damas de Oriente, los responsables de Mira cómo se mueven (exposición de la Fundación Telefónica) y, desde Jerusalem, Agustín Remesal, director de la serie La raya quebrada (TVE)]

¿Y dónde está la voz?

Por ahora no está, eso es evidente. Aún no sé cómo atar los sonidos que el viento lleva y trae a esta bitácora. Pero estoy indagando, consultando las fuentes... Tarde o temprano habrá audios en este blogg. Y si no al tiempo y al olvido con él y conmigo.

Para el libro "La Fuerza del Optimismo" de Luis Rojas Marcos (La Ciudad Invisible)

OPTIMISMO:
Doctrina o creencia que sostiene que todo es hermoso, incluyendo lo que es feo, que todo es bueno, especialmente lo malo, y que es correcto lo que no lo es. Es defendida con gran tenacidad por aquellos más que acostumbrados a vivir en la adversidad, y que encuentran muy aceptable exponerla con una mueca que simula una sonrisa. Al ser una fe ciega, es inmune a la luz de la refutación. Dada su naturaleza intelectual, no existe otra cura que la muerte. Es hereditaria, pero afortunadamente no contagiosa.

Diccionario del diablo
Ambrose Bierce