09 de Noviembre

Hoy os vamos a tratar a palos, y no es broma. El flamenco en sus múltiples variantes se filtra hasta el más recóndito rincón de este navío errante que hoy acoge a dos titanes, a dos mitos vivientes del cante y el rasgueo guitarrero. Será que nos excita reventar los blindajes que los necios imponen al sentir hecho música...
Comienza este periplo cuando embarque en la nave un hombre que responde al nombre de Pepe de Lucía. Se nos presenta tajante, seguro de un destino señalado desde sus días de infancia que ha plasmado en un disco: Tomo y obligo. De él nos hablará frente a la indómita y procelosa Mar de las Ondas Hertzianas.
Más allá se unirá al pasaje otro de esos individuos que ya han plantado un pie en la Historia de la Música española: Rafael Amador. Con su retorno vuelve del silencio aquella banda legendaria que parió las “Blueslerías” en el Barrio de las 3.000 viviendas de Sevilla. Hablo de Pata Negra. Rafael, dispuesto a reanimarla, inicia gira y nos anuncia un disco. Veremos que se cuenta y, ojalá, qué se canta...
Y así, echando un cantecito –que diría Veneno- trataremos de arribar al buen puerto de la Ciudad Invisible.